«Fanne» es una esencia profunda y enigmática, ideal para aquellos que buscan una fragancia con carácter y una presencia distintiva. La fragancia se abre con la nota robusta y amaderada del cedro, cuyo aroma terroso y resinoso evoca la solidez y la tranquilidad de los bosques antiguos. El incienso añade una dimensión mística y meditativa, con su aroma ahumado y sagrado que invita a la introspección y al recogimiento. La vainilla introduce una dulzura cálida y acogedora, suavizando la intensidad del incienso y el cedro con su toque reconfortante y familiar. Finalmente, el haba tonka completa la composición con su riqueza cremosa y un matiz ligeramente tostado, aportando una profundidad exquisita y una sensación de lujo sutil.